domingo, 14 de febrero de 2016

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (9)

   En definitiva, cuando termin´ñe la visita completa al Museo eran ya más de las tres de la tarde. Teniendo en cuenta que había entrado sobre la 10,15, esto significa que había permanecido en el mismo unas 5 horas, por lo cual resultaba ya bastante dificultoso mantener la atención, por mucho que me lo propusiera. Afortunadamente esto aconteció precisamente cuando recorría las salas de pintura contemporánea.
   Dos cosas resaltaría de esta visita. Por un lado la extraordinaria importancia de la colección particular de Carmen Cervera (me niego a llamarla Carmen Thyssen), lo cuya pone de manifiesto el magnífico braguetazo que protagonizó. Por otro, resulta muy lamentable que en una pinacoteca de semejante categoría se produzcan chapuzas como las acaecidas con las audioguías, pues tanto en la exposición temporal como en las permanente se produjeron fallos. En la primera no coincidían los números de la audioguía con los de las obras expuestas y se le entregaban al visitante un papelito con lios fallos detectados; en la segunda, no aparecían lios comentarios de los diez primeros números de la colección particular de la baronesa Thyssen.
   El mismo miércoles por la tarde hicimos el viaje de vuelta rumbo a Sevilla.
  

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (8)

  La visita a la exposición temporal me llevó aproximadamente una hora y a continuación decidí girar una breve mirada a la exposición permanente, puesto que ya hace muchos años que la visité por primera vez. Quizás debido a mi larga experiencia como profesor de historia, tengo la costumbre de aplicar siempre el criterio cronológico. Así que comencé la visita por la segunda planta, concretamente con la sala nº 1, dedicada a la pintura de los Primitivos italianos, la terminé ya de forma acelerada recorriendo las salas de la planta baja dedicadas a la pintura contemporánea, que no es precisamente mi predilecta.
   En el recorrido contemplé algunas obras de pintura muy reproducidas en los libros de historia del arte, aunque debo reconocer que yo esta asignatura la impartí en contadas ocasiones. Así me resultaron familiares, entre otros,  el retrato de Enrique VIII, obra de Hans Holbein el Joven, y el del Joven caballero, debido al pincel de Vittore Carpaccio. Eché de menos alguna obra atribuida a Velázquez y constaté que sólo se expone un cuadro de Zurbarán y otro de Murillo. Así que en este aspecto el Museo Provincial de Bellas Artes de Sevilla está muy por encima del Tyssen, aunque en otros estilos pictóric os, tales como el impresionista sea exactamente al revés

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (7)

  Al día siguiente, martes, acompañado en esta ocasión excepcionalmente por mi mujer, acudimos a la exposición instalada en el centro de exposiciones de Arte Canal, sito en el Paseo de la Castellana, junto a la plaza de Castilla. Allí se expone una muestra titulada "Cleopatra y la fascinación de Egipto", la cual está organizada en nueve ámbitos, el último de ellos dedicado precisamente a la fascinación que ha producido Egipto en el caso concreto de España. Tras la visita se hace uno la idea del significado del reinado de la última representante de la dinastía de los Ptolomeo, instaurada en Egipto tras la muerta de Alejandro Magno allá por el siglo IV a. C. y como el territorio pasó a formar parte del Imperio Romano después de la derrota de Marco Antonio y Cleopatra ante Octavio en la batalla naval de Actium (31 a. C.). También se pone de manifiesto la persistencia del mito de Cleopatra, al cual ha contribuido mucho tanto la literatura como el cine. La visita duró unas dos horas y respecto a las audioguías en este caso son perfectamente prescindibles, dado que se limitan a repetir los contenidos que ya aparecían en los carteles de la exposición.
  Por fin el miércoles, día 10 de febrero, efectué la última visita a un museo en el transcurso de mi último viaje a la llamada capital del reino. En este caso le correspondió al museo Thyssen-Bornemisza. Aunque en un principio solo pensaba visitar la exposición temporal titulada "Realistas de Madrid", al final recorrí practicamente todas las salas del Museo. La muestra temporal presenta 90 obras de siete artistas, con  parentesco entre ellos, destacando la figura de Antonio López. Aparecen bodegones, escenas de interior, jardines y paisajes urbanos de carácter hiperrealista, donde los objetos cobran una naturalidad apabullante. Alternan las obras pictóricas con las escultóricas.

sábado, 13 de febrero de 2016

Impresiones sobre mi último vuiaje a Madrid (6)

Me llamó especuialmente la atención el hecho de que precisamente la idea de botar al Titanic se adoptara en el edificio que actualmente ocupa la embajada española en Londres y que la mayor parte de las víctimas de un total de 1495 no se produjeran por ahogamiento sino por hipotermia y que el elevado número de víctimas se debío al desfase entre la legislación vigente en materia de seguridad y el avance tecnológico que permitía la construcción de unos buques enormes, desprovistos de las adecuadas medidas de seguridad,. En este caso concreto, de haber dispuesto de un suficiente numero de barcazas de salvamento hubiese atenuado los efectos del hundimuiento.
  Después me dirigí a la Casa de América donde visité una exposición dedicada a la figura de Bernardo de Gálvez, un militar español que desempeñó un importante papel en la guerra que desembocó en la independencia de los Estados Unuidos. Aunque murió joven, a la edad de 40 añios, llegó a desempeñar el cargo de virrey de Nueva España. Aunque la muestra está instalada atendiendo especialmente a los aspectos militares, sin embargo se pueden observar otros aspectos, tales como el papel desempeñado por la monarquía borbónica esopañola en el plano internacional en las postrimerías del siglo XVIII. En esta y única ocasión, la entrada es gratuíta.

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (5)

Lo que más me impresionó fue la capacidad de razonamiento y la inmensa memoria que todavía atesora, pues no hay que perder de vista que ya ha cumplido lios 87 añios. Me dijo que ha confeccionado un librito referente al análisis del apellido Espínola en el caso concreto del pueblo de Alanís y también me explicó porqué había decidido que dicho apellido apareciese como Spìnola en la última edición de su libro. Me regaló el libro escrito por Gregorio Morán sobre el primer presidente de la presente etapa democrática española, titulado "Adolfo Suárez. Historia de una ambición".
 El quinto día de mi estancia en Madrid, es decir, el lunes, día 8 de febrero, voy a visitar la exposición dedicada al hundimiento del Titanic que alberga el Centro Cultural de la Villa "Fernán Gómez", sito junto a la plaza de Colón. Allí se exponen más de 200 objetos rescatados del naufragio que tuvo lugar la fatídica madrugada del 15 de abril de 1915. Realicé la visita provisto también de una audioguía y en contra de lo que yo pensaba había muchos niños, a pesar de que era lunes (después me enteré de que ese lunes era festivo en Madrid por los carnavales). La visita duró aproximadamente unos 90 minutos y como en todas kas catástrofes aparecen ejemplos de heroicidad y de villanía. Como héroes se portaron todos lios componentes de la orquesta que perecieron , sin dejar de tocar sus instrumentos.

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (4)

  Lástima que tanto el Castillo de la Alameda como el parque del Capricho solo abran los sábados y los domingos, aunque mucho me temo que muchos vecinos de los barrios limítrofes aún no los conozcan.
  De todas maneras, en el caso del Castillo tiene un itinerario flanqueado por un total de nueve paneles explicativos  referentes a las diversas fases por las que ha pasado el monumento, que tras pasar por las manos de varias familias nobiliarias (los Mendoza, los Zapata y lios Fernán-Núñez), fue abandonado a finales del siglo XVII y expoliado posteriormente. Tanto es así que los materiales para la construcción del mencionado palacete del parque del Capricho se extrajeron de sus ruínas. Muy recientemente ha pasado a ser propiedad del ayuntamiento de Madrid, que ha procedido a una restauración parcial, aunque todavía falta bastante por hacer. Dentro del recinto se encuentra una casamata donde los republicanos establecieron un nido de ametralladoras como avanzadilla del búnker establecido en el parque del Capricho.
 Ese mismo sábado, pero hacia mediodía, me entrevisto en su casa con mi paisano Francisco Espínola.Para ello me tengo que desplazar hasta el barrio de la Concepción. Aunque ya había hablado por teléfono con él en varias ocasiones, no lo conocía personalmente. Estuvimos charlando alrededor de una hora y media y la conversación versó fundamentalmente sobre el tema de la memoria histórica, aplicada al caso concreto de nuestro pueblo, Alanís. No hay que perder de vista que él ha escrito un libro, "Mis recuerdos de Alanís", con referencias al contexto de la Guerra Civil.

Impresiones de mi último viaje a Madrid (3)

 las cuentas del Museo del Prado deben presentar superavit.
 Tras atravesar el Paseo del Prado llego al edificio del Caixaforum, donde pretendo visitar una exposición temporal titulada "Mujeres de Roma. Seductoras, maternales, excesivas." Se trata de representar una visión poliédrica del papel de la mujer en la sociedad romana, donde a pesar de su papel subalterno algunas desempeñaron un gran protagonismo, especialmente aquellas integradas en las familias imperiales. Muchas de las piezas escultóricas proceden de los fondos del museo del Louvre y también se proyecta un interesante documental referente a la Villa de lios Misterios de Pompeya.
   En las dos exposiciones anteriores me proveo de sendas autoguías que me sirven para apreciar aspectos que no se reconocen a simple vista.
  El día siguiente, sábado, día 6 de febrero, doy un paseo por la mañana en dirección a un parque muy coqueto y resguardado, próximo a la Alameda de Osuna llamado El Capricho, donde los duques de Osuna se construyeron un palacete en el siglo XVIII, y donde el propio Goya realizó algunas de las pinturas relacionadas con esta familia nobiliaria. Solo dí un corto paseo, contemplando una glorieta llamada la Exedra y el exterior del aludido palacete. Precisamente al lado del mismo se encuentra el búnker desde el que el general Miaja dirigió la defensa de la zona norte de Madrid ante los embates de los militares facciosos durante el cerco de la capital en la Guerra Civil.
 Al día siguiente, domingo, doy un paseo por el parque Juan Carlos I y de regreso aprovecho para visitar las ruinas del castillo de la Alameda, cuyos restos arqueológicos más antiguos proceden del Calcolítico.

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (2)

Cambiando de tema, por muchas veces que regrese a Madrid nunca deja de asombrarme su inmensa oferta cultural, sobre todo si la comparo con la de Sevilla. Sospecho que para una persona jubilada como es mi caso, en el supuesto que todos los días se propusiese acudir a un evento cultural, le faltarían días del año para poder cumplir su propósito. Así que cada vez que me desplazo hasta ella no tengo más remedio que proceder a una rigurosa selección en las visitas a las exposiciones, dejando aparte por supuesto otros eventos culturales. Para empezar, el viernes día 5 dediqué practicamente toda la mañana a visitar sendas exposiciones temporales en el museo del Prado y en el Caixaforum. En el primer caso giré una visita a la muestra dedicada al pintor francés Jean-Auguste-Dominique Ingres (1780-1867), cuya obra entre el neoclasicismo y el romanticismo ha resultado muy controvertida para los teóricos del arte. Fue un gran admirador del pintor renacentista Rafael y a su vez ejerció una gran influencia sobre pintores destacados posteriores como es el caso de Pablo Picasso. Como obras expuestas en esta exposición destacan los retratos referentes a Napoleón, el de la condesa d¨Hansonville y el más conseguido desde mi punto de vista, el del burgués Louis-Francois Bertin, que figura al final de la muestra. También destacan varios desnudos femeninos, tales como el titulado La gran odalisca y también El baño turco, ambos dentro de un ambiente exótico y orientalizante. Ya que estaba dentro del recinto del Museo, aproveché para echar un vistazo a una sala donde se exponían una serie de retratos de personajes de la época debidos al pincel del pintor Federico de Madrazo y también dí una ojeada a la nueva adquisición del Museo, el cuadro titulado La Virgen de la Granada, procedente de la colección de la Casa de Alba. Por cierto, debo decir que a pesar de que procuré estar a las puertas del Museo antes incluso de que abriesen las taquillas a las 9,45, no pude evitar encontrarme sumido en una larga cola en el acceso por la Puerta de los Jerónimos, compuesta fundamentalmente por personas con rasgos orientales. A la vista de la gran afluencia de público, cabe deducir que

Impresiones sobre mi último viaje a Madrid (1)

Ha tenido lugar entre los días 4 y 10 del presente mes de febrero. Concretando más, salimos de Sevilla , de la estación de Santa Justa, a las 9,15 del jueves, y regresamos a la misma a las 21,30 horas del miércoles siguiente.
 Tanto en un sentido como en otro realizamos el viaje en el AVE, de forma rápida y cómoda, máxime teniendo en cuenta que en ambas ocasiones tuvimos la suerte de poder conseguir asiento en vagones silenciosos, un buen invento desde mi punto de vista, pues así no te ves obligado a soportar las estridentes peroratas de los ejecutivos de turno, perpetradas a través de sus móviles.
 Durante toda nuestra estancia en la capital el tiempo se ha portado correctamente, aunque la mayor parte del tiempo el cielo ha permanecido encapotado.
 Nos hemos hospedados en el piso de mi cuñada Chari, sito en el barrio de la Alameda de Osuna, conectado con el centro de Madrid por medio de la línea 5 del metro, un medio de transporte que no suelo coger en Sevilla y que no deja de sorprenderme por su puntualidad, pues lo máximo que he llegado a esperar han sido cinco minutos. Por cierto que aparte de cosas ya asumidas como la constante presencia de pedigüeños y de músicos ambulantes he de resaltar dos aspectos. Por un lado que ya casi nadie porta un libro de lectura sino que la mayoría manipula un teléfono móvil, lo cual denota desde mi punto de vista una clara banalización de la cultura; por otro, en esto lios madrileños se parecen bastante a los sevillanos, practicamente nadie respeta los asientos reservados a la personas con movilidad reducida.