Debo empezar diciendo que tuvimos que suspender la sesión correspondiente al 22 del pasado mes de octubre dedicada a la Transición porque a los directivos de Participación Ciudadana se les ocurrió utilizar el salón de actos del Centro Cívico "Torre del Agua" para desarrollar uns Jornadas internacionales sobre los Presupuestos participativos, sin tener ni siquiera el detalle de avisarnos previamente. Así se lo he hecho saber, primero, a Francisco Zurbano, y hoy mismo al director general de la citada Delegación. Es una prueba fehaciente más de que estos cargos de Izquierda Unida sólo pretenden utilizar el proyecto de los Presupuestos participativos con fines electoralistas, sin preocuparle lo más minimo la calidad de la actividad. Además, promocionando esas Jornadas internacionales encuentran una magnífica ocasión para realizar viajes al extranjero financiados con fondos públicos. Si no que se lo pregunten al mencionado director general, Miguel Carvajo, o a la propia delegada de Participación ciudadana, Josefa Medrano, que ya han disfrutado de un par de viajes, uno de ellos a Brasil.
En otro orden de cosas, del 30 de octubre al 8 de noviembre, acompañado de mi mujer y de un matrimonio amigo, he efectuado un viaje a la Manga del Mar Menor, a través del IMSERSO.
En dicho viaje hemos tenido la ocasión de participar en cincon excursiones organizadas, acompañados por sendos guías, unas de días completos, y otras de medio día. Los destinos de las primeras han sido Caravaca de la Cruz, Águila-Mazarrón y Murcia. En cuanto a las dos excursiones cortas tenían como objetivo una visión panorámica de practicamente toda la lengua de tierra que constituye la Manga (unos 18 ki8lómetros de longitud) y un recorrido en barco a través del Mar Menor con un reconocimiento exterior de sus cinco islas.
Aparte, ya por nuestra cuenta, hemos organizado tres visitas a escenarios próximos: dos a Cartagena y uno a la ciudad de Murcia. El medio de transporte utiulizado ha sido en todos los casos el autocar. En el caso de Cartagena las dos cosas que más me han gustado han sido el museo arqueológico subacuático, instalado al lado del puerto, con objetos extraidos del fondo del mar, y el museo del Teatro romano, instalado frente al Ayuntamiento, que también visitamos. Ambos museos son muy recientes y están instalados en edificios debidos a Guillermo Vázquez Consuegra y Rafael Moneo respectivamente. En cuanto a Murcia, el edificio más interesante que visitamos por nuestra cuenta fue el Casino, algunas de cuyas estancias poseen un lujo desmesurado. En la excursión organizada por el IMSERSO habíamos visitado ya la catedral y el museo de Salzillo.
Nos hemos hospedados en el hotel Entremares de la Manga, uno de los más antiguo de la zona, pues fue inaugurado por Fraga cuando era ministro de Información y Turismo en la década de los 60 del pasado siglo, aunque ha sido remozado posteriormente. Si bien parece que está sobrado de estrellas (tiene cuatro), sus instalaciones son aceptables así como la comida.
En otro orden de cosas, del 30 de octubre al 8 de noviembre, acompañado de mi mujer y de un matrimonio amigo, he efectuado un viaje a la Manga del Mar Menor, a través del IMSERSO.
En dicho viaje hemos tenido la ocasión de participar en cincon excursiones organizadas, acompañados por sendos guías, unas de días completos, y otras de medio día. Los destinos de las primeras han sido Caravaca de la Cruz, Águila-Mazarrón y Murcia. En cuanto a las dos excursiones cortas tenían como objetivo una visión panorámica de practicamente toda la lengua de tierra que constituye la Manga (unos 18 ki8lómetros de longitud) y un recorrido en barco a través del Mar Menor con un reconocimiento exterior de sus cinco islas.
Aparte, ya por nuestra cuenta, hemos organizado tres visitas a escenarios próximos: dos a Cartagena y uno a la ciudad de Murcia. El medio de transporte utiulizado ha sido en todos los casos el autocar. En el caso de Cartagena las dos cosas que más me han gustado han sido el museo arqueológico subacuático, instalado al lado del puerto, con objetos extraidos del fondo del mar, y el museo del Teatro romano, instalado frente al Ayuntamiento, que también visitamos. Ambos museos son muy recientes y están instalados en edificios debidos a Guillermo Vázquez Consuegra y Rafael Moneo respectivamente. En cuanto a Murcia, el edificio más interesante que visitamos por nuestra cuenta fue el Casino, algunas de cuyas estancias poseen un lujo desmesurado. En la excursión organizada por el IMSERSO habíamos visitado ya la catedral y el museo de Salzillo.
Nos hemos hospedados en el hotel Entremares de la Manga, uno de los más antiguo de la zona, pues fue inaugurado por Fraga cuando era ministro de Información y Turismo en la década de los 60 del pasado siglo, aunque ha sido remozado posteriormente. Si bien parece que está sobrado de estrellas (tiene cuatro), sus instalaciones son aceptables así como la comida.
